En estas historias hay dos elementos imprescindibles: un mnimo de un cadver, y un detective. Un investigador sagaz e intelectualmente superior al resto de los personajes de la historia que husmea, interroga y busca pistas por el escenario del crimen (a menudo, como en 'Orient Express', limitado en el espacio). Estos personajes, los detectives profesionales o aficionados, son uno de los grandes tropos de las ficciones policiacas, y su presencia se remonta a los orgenes literarios del gnero.